jueves, 14 de mayo de 2009
Allá, en la ciudad perdida
Ellos rezan detrás de las montañas
lanzan conjuros al viento
tejen sueños a través del mar
Ellos son asesinados
silenciados
Utilizan sus campos como zonas de guerra
la sangre derramada
cubre el país y sus fronteras
Ellos lloran y lanzan sus lágrimas al cielo
encima de las piedras mágicas
donde pactan giros de gracia
Encima de las piedras y sus montañas
se construyen discotecas y centros comerciales
atractivo turístico dicen
ellos en silencio
rezan por el territorio robado
Ellos, con su ropaje blanco
transparente, diáfano
lanzan conjuros al sol
para ver
si algún día
después del después
sus crímenes no quedarán tan impunes
El hombre blanco
muchos siglos después
sigue atropellando
los sueños del indio
El hombre blanco
(militar, guerrillero, paramilitar)
como en la conquista
asesina e impone
silencia
Sólo se escuchan mil voces
a través del silencio
con lenguas multicolores
que claman
entre otras cosas
un poco de libertad
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario