sábado, 6 de junio de 2009

¿...Podrías...?

Podés dejarlo todo donde lo encontraste
La mesa de noche arrinconada detrás del gran sillón
La cama de espaldas a la puerta porque traía mala suerte
Tu ropa escondida en los cajones
Tus zapatos viejos, cansados de andar

El reloj de la abuela que todos los días marcaba la misma hora
El televisor que colgaba de la pared
Los cuadros compartidos
Las paredes blancas
Los libros viejos

La cama compartida
Donde acostados parecíamos
Desconocidos
La sala de estar donde leíamos en voz alta algunos poemas

Podés irte
Sin necesidad de regreso
Podés abandonar estos espacios compartidos
Estos momentos tan distintos
Tan distantes

Podés dejar tu ausencia
Impregnando estos cuatro rincones
Podés dejar tu indiferencia
Reclinada en el diván

Podés simplemente, alejarte
En silencio
Dejar el vacio
Que pronto
Encontrará sosiego

Podés dejar tus cosas
A un lado
Y continuar por caminos bifurcados
Podés dejarme en paz
Con el corazón fragmentado
Fenecido

Podés desaparecer entre la niebla
En la tiniebla irrevocable del no retorno
Podés, simplemente
Convertirte en el infame
Fantasma de invierno
Que acosa mis noches
Acecha mi sigilo

Podés
Desaparecer
Y con vos tus rastros
Tus huellas
Caricias
Besos
Momentos
Cosas
Silencios
Silencios…
Silencio.

1 comentario:

VicToria dijo...

El asunto es no permitir que nos dejen basura, esa sería nuestra culpa.